Emulando los grandes clásicos, The artist es un regalo para los sentidos, un salto al pasado que no siempre convence pero que esta ocasión, ha triunfado.
Bonita en su forma, con esta estética tan peculiar, consigue emocionar de una manera extraordinaria. Sus protagonistas aportan el carisma necesario para que todo tenga sentido. Ella es una joven aspirante a actriz que por un golpe de suerte, es catapultada a la fama. Él es una actor ya consagrado que va perdiendo fuelle hasta su desaparición artística. Sus destinos se cruzan y surge entre ellos una atracción que se mantendrá a través de los años.
Dos actores perfectamente compenetrados que consigen transmitir al espectador una cantidad increíble de emociones. Me recuerdan a esos grandes actores de esa época: Gene Kelly, Fred Astaire, Ginger Rogers.... Muchos la han criticado por eso, bebe de esos grandes clásicos, a mi humilde opinión, vi en ello una virtud. El guión no es nada original, una estrella venida a menos es algo que estamos cansados de ver a lo largo de los años en Hollywood. Ahora mismo viene a mi cabeza una de las más grandes cintas sobre ese tema "El crepúsculo de los diosos" Recordar a esos que han quedado en el olvido con el cambio de cine mudo a sonoro me parece algo precioso y si se hace a través de cintas de tanta calidad, no le veo nada de malo.
Además de estas virtudes, The artist tiene una banda sonora impresionante, se llevó un Oscar muy merecidamente. Destacar también la fotografia o su vestuario, esta obra que roza la perfección, todo el mundo debería disfrutarla.